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Quizás una de las mejores cosas del invierno sean los looks comfy y con ellos llegan el básico de nuestro outfit que vamos a necesitar pase lo que pase: los abrigos. Son esa codiciada prenda que tiene el poder de montar un outfit completo, sin importar lo que haya debajo (que siendo sinceros, probablemente sean unos pantalones de chándal).
De cara a la temporada otoño-invierno 2020 existen una gran variedad de opciones en lo que a abrigos se refiere.
Ya sea para darle vida a los looks con uno llamativo o, quien sabe, hacer una inversión en otro más clásico y versátil en tono camel… hemos encontrado las opciones más variadas en las cuentas de Instagram de nuestras expertas en moda.
Comencemos con lo más estridente… Los abrigos coloridos siempre son un must, aunque el tono en cuestión, depende de las tendencias de la temporada. Si buscas la opción más moderna, súbete al carro de los lilas.
Aunque durante mucho tiempo los tonos pastel parecían exclusivos de la primavera y el verano, desde hace unas temporadas, diseñadores como Hugo Boss y Alexander McQueen los han incorporado a sus colecciones invernales. Para algo más duradero, busca tonos naranja o rojo intenso.
La gabardina es un clásico moderno que gusta a las influencers por su versatilidad. Con vaqueros boyfriend y zapatillas blancas o con un vestido estampado y botas, la gabardina tiene esa habilidad mágica de dar el toque final al look.
Luego, tenemos los abrigos de cuadros que sufren un lavado de cara y el estampado más tradicional aparece en abrigos y capas de tamaño XXL. Las posibilidades para combinarlos son infinitas y van desde faldas (en todos sus largos) hasta pantalones de cuero.
Los cinco abrigos de temporada
Para looks más informales, llegan pisando fuerte los plumas. Son los más abrigados y no solo por su relleno si no porque nos permiten llevar varias capas para esas quedadas en terrazas de la era Covid-19. Bershka tiene unos en tonos fluor que genera un efecto óptico con el cual parece que el plumífero cambia de color en función de la luz y del ángulo.
Si teletrabajas y tu plan invernal no va más allá de salir de casa para hacer unos recados, la alternativa puede ser un abrigo de peluche. Los de corte de gran tamaño viven su mejor momento y se pueden llevar con sudaderas con capucha o prendas de punto muy gruesas. ¿No te gusta el mundo peluche? Busca uno de lana.
Permiten combinar sin grandes esfuerzos los looks, tanto si llevan un cinturón, botones o cuello smoking… los estilos de la temporada se adaptan a todos los gustos.
Las amantes del minimalismo se van a encontrar con abrigos negros realizados con vinilo o cuero, mientras que los abrigos camel abren el abanico de tonos e incorporan chocolate, caramelo y café.
Redaccion
